Cortamos rollos de papel higiénico por la mitad, los pintamos con pinturas acrílicas metalizadas, les puse un fondo de papel kraft y les pegué unas pegatinas que hice con Silhouette Studio. Dentro hay chuches (una para cada uno) y algunos días papeles para que busquen regalos escondidos (algunas chuminadas y algunas cosas útiles).
Es rústico a tope, pero a los niños les ha encantado. La Patrulla Canina lo mejora todo al instante, jajaja.
Me gusta la idea, me la guardo para el año que viene. Este he vuelto a usar el del año pasado, no me ha dado tiempo a más XD
ResponderEliminarJajaja. Debe de ser que tú vas más de culo que yo... ni que tuvieras un bebé. :P
EliminarDemostrando que no es necesario hacer algo muy complicado para que el resultado sea bonito y decorativo!
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